5 de octubre de 2013

ÉRASE UNA VEZ EL AMOR



Se conocieron chateando en la red. Después acordaron una cita, pero la relación no fue a más porque él acudió vestido de negro y ella sólo esperaba encontrarse con su príncipe azul.©

EL HOMBRE SIN SOMBRA


El hombre no tenía sombra. El día que nació notaron que no tenía sombra, lo cual lo hacía un hombre especial, diferente a los demás hombres. Sucede que quiso tener su propia sombra y salió en busca de ella, pero no cualquier sombra; el hombre sin sombra quería una sombra especial, una que no la tuviera ningún otro hombre. Buscó debajo de la luz y en los grises del día. En las playas atestadas de gentes bajo el sol. Mejor dicho, en toda parte. Buscó y volvió a buscar hasta que por fin la encontró. Sin embargo, una vez se la colocó, se sintió como todos los demás hombres: vacío, sin gracia y sin convicción. Nunca pudo tener su propia luz entre tanta sombra.©

CONDENA


Y esta fue su condena. Intentar escribir con originalidad.©

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